19 jun 2010

A veces dicen que es bueno mirar al pasado...

Ayer, cuando fuimos al Juan Vazquez, de paseo turístico por nuestra infancia, me di cuenta de una de las razones por las que me hice este blog.
Aún recuerdo a esa niña patosa y torpe que amaba los libros. Me podía pasar recreos y recreos leyendo, mientras mis compañeros juagaban al fútbol, o quién sabe a qué.
Era casi mi vida, leer y escribir. Así con 10 años podía presumir de leer libros "para mayores", como los llamaba yo, Julio Verne, Oscar Wilde, Walter Scott, Stevenson, casi todos los clásicos.
Y escribir... era mi pasión. A mi maestro se le ponía la piel de gallina leyendo, una vez llegó a reconocérmelo. Leía y se preguntaba una y otra vez, cómo una niña de apenas 12 años podía hacer ese tipo de metáforas, hipérbaton y utilizar tantos recursos y narrar tan bien.
No sé... para mí era algo especial, era sentirme yo... Olvidarme de todo... Una sensación casi indescriptible.
¿Qué paso? Supongo que lo que pasa siempre, esa niña creció... y bueno, que si instituto, que si salir... Al final creo que ese talento se esfumó, no supe valorarlo y como es de suponer se iría olvidado después de haberle ignorado durante tanto tiempo.
Volver a mi colegio, también me hizo ver las cosas desde otro punto de vista. Esas aulas que me parecían inmensas, ahora son simples habitaciones que esconden recuerdos maravillosos.
Esas perchas en la pared en la zona de infantil, esas que estaban tan altas... Ahora me resultan tan pequeñitas...
Cada rincón, cada pasillo, cada clase tiene una historia que contar.
Era cerrar los ojos, y volver al pasado... Volví a ver a Doña Emilia contándonos un cuento, a ese profesor de música con el que cantábamos canciones de Estopa en clase, e incluso a cierto maestro de inglés al que siempre quise parecerme.
Me ha gustado mirar al pasado, a veces dicen que es bueno.
A mí, me ha servido bastante. He podido recordar como era, y verme como soy ahora.
¿Y sabéis qué? Me siento orgullosa. Puedo decir que con 16 años que tengo, me considero una persona madura, por lo menos para mí edad, bastante consciente y que tiene claro que camino es el correcto.
Sólo espero que la suerte esté de mi lado y me brinde la oportunidad de disfrutar de la felicidad que hasta ahora me ha regalado.
No sé por qué, pero hoy me siento afortunada de ser quién soy.

1 comentario: